lunes, 7 de marzo de 2016

Servicios de urgencias específicos para ancianos








La atención a los ancianos es mejor que se resuelva a nivel de la atención primaria, con una orientación geriátrica y en un entorno comunitario. Sin embargo, a veces, las personas mayores necesitan ir a urgencias por motivos muy variados como podrían ser una fractura, una fibrilación, una retención, un ahogo repentino o una obstrucción, por poner algunos ejemplos. Lo que ocurre entonces es fácil de imaginar, el paciente geriátrico es sometido a una triaje que le conduce a un box lleno de aparatos, con mucha gente preguntándole las mismas cosas de manera repetitiva, algunos de ellos con poco tacto y casi siempre con escaso respeto por su intimidad, además de ruido de mucho trasiego en el pasillo y de timbres y alarmas de máquinas y monitores, y un largo etcétera, que fácilmente produce la desorientación del paciente mayor, o delirio en el peor de los casos.

Hacia un nuevo diseño de servicios de urgencias específicos para personas mayores

En el blog de la British Geriatrics Society, la Dra. Rosa McNamara, defensora de la creación de servicios de urgencias específicos para personas mayores, hace una semejanza con lo que pasó hace unos años con la creación de servicios de urgencias pediátricas. Los niños, afirma, tienen características psicológicas, físicas y sociales diferentes a las de los adultos, y necesitan cuidados de enfermeras y médicos especializados que les garanticen un trato apropiado. Hoy sería impensable tener que tratar un niño en un entorno de servicio de urgencias generales y, lo que sería peor, que lo hicieran enfermeras y médicos sin experiencia en pediatría.

¿Cómo debería ser un servicio de urgencias geriátricas?

American Geriatrics Society y otras tres sociedades científicas, también norteamericanas, relacionadas con los servicios de urgencias, han publicado el documento, "Geriatric Emergency Departament Guidelines", que ofrece las pautas para la creación de servicios de urgencias geriátricas. Es un documento que habla de las características estructurales que debería tener el espacio: el menos ruidoso posible, los boxes deberían preservar la intimidad, la iluminación debería adaptarse a los ciclos circadianos (día/noche), debería haber relojes analógicos grandes y visibles en las paredes, los suelos deberían ser antideslizantes, los colchones antiescaras, los sillones confortables, debería haber asideros en los lugares claves, etc. Se trata de definir un espacio, habitualmente junto al servicio de urgencias generales, adaptado a las necesidades geriátricas. Pero la estructura, evidentemente, no lo es todo, y por eso el documento define criterios de triaje, funciones profesionales, protocolos para evitar las complicaciones geriátricas más habituales y, sobre todo, cuál debería ser la formación básica de los profesionales asignados (enfermeras, trabajadores sociales y médicos).

El primer servicio de urgencias geriátricos abrió las puertas al Holy Cross Hospital de Silver Spring en EEUU en 2008, y ocho años más tarde ya son cientos los hospitales norteamericanos que ofrecen este servicio. Por eso me ha parecido relevante que la British Geriatrics Society haya abierto el debate sobre la oportunidad de potenciar los servicios de urgencias geriátricas en el marco de los servicios europeos de carácter público.

Posted by Jordi Varela, editor

7 comentarios:

  1. El paciente pediátrico y el paciente geriátrico tienen necesidades específicas, pero la homogeneidad entre la población pediátrica no es equiparable a la población anciana.

    Las urgencias al igual que otras salas de los hospitales estan llenas de ancianos, se debe "geriatrizar" más que trabajar a parte con un "servico de urgencias para ancianos".

    No me termina de convencer la idea de un servicio de urgencias para ancianos

    ResponderEliminar
  2. En mi opinión personal, La cuestión no es tratar los ancianos en un lugar a parte, sino concienciar al personal de urgencias de todos los estamentos que si no está formado especificamente en la atención al paciente anciano, su formación es incompleta. (Cómo no estar suficientemente formado en cardio, pnemo , etcc). El geriatra deberia estar dispoble como consultor, ya sea en tu hospital o telefonicamente en el centro de referencia ( como el cardio, el neuro, etc).
    Pero si los equipos directivos de los hospitales no entienden así la situación, y si desde el gobierno no se considera urgencias una especialidad, y por tanto, no exige una formación reglada obligatoria, la situación no se arreglará con estructuras arquitectónicas a parte. En USA existe la especialidad de urgencias y es obligatoria la rotación especifica de geriatria, tal vez por eso el modelo funcione.
    Laura Robles Perea
    Geriatra. Médico adjunto de Urgencias.

    ResponderEliminar
  3. Despues de llevar diez años siendo la geriatra de la unidad de urgencias del Hospital Arnau de Vilanova creo que la geratrizacion arquitectonica de los servicos de urgencias no es la clave
    El paciente anciano es el mas numerosos de dichos servicios pero si valoraramos a tres pacientes ancianos de 80 años con la misma patologia el abordaje en urgencias de los mismos seria diferente por que el impacto del envejecimiento y la multimorbilidad no impactan igual y esa es la clave.Todo el personal de urgencias necesitan las herramientas necesarias para hacer una valoracion global geriatrica que les permita conocer las particularidades de esto pacientes y determinen la intensidad del tratamiento y el mejor nivel asistencial,y les aseguro que es posible.

    ResponderEliminar
  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  5. En mi opinión no se trata tanto m de diferenciar un servicio de urgencias geriátrico del servicio de urgencias general, teniendo en cuenta que ya tenemos una mayoría de población geriátrica en estos servicios, como de encontrar un equilibrio entre lo que el paciente geriátrico necesita y lo que los servicios de urgencias pueden ofrecer en cuanto a medios se refiere (y eso incluye conocimientos, personal, ubicación, tiempos de asistencia, multidisciplina y trato, por citar algunos aspectos a tener en cuenta). La mayoría de profesionales que atienden los servicios de urgencias ya se hallan familiarizados con el paciente geriátrico, pues muchos de ellos se reclutan desde el ámbito de primaria, aunque siempre es necesario ir adquiriendo conocimientos y habilidades en el manejo del paciente geriátrico, dada su creciente esperanza de vida y complejidad.
    La mayoría de servicios de urgencias están organizados (o desorganizados) en un equilibrio tan precario de espacios estructurales y tiempos asistenciales que la estancia en ellos de cualquier paciente, geriátrico o no, se traduce en una sucesión de incomodidades, algunas de ellas evitables a base de buen trato, y otras más difíciles de resolver por motivos obvios estructurales. Los servicios de urgencias son, en muchos casos, la primera entrada y cara visible de un paciente en un hospital, y necesitarían de una reorganización integral que va mucho más allá de la asimilación del paciente geriátrico en ellos, incluyendo por supuesto un buen drenaje del servicio que evite la eternización de los pacientes en ellos, sobretodo de los pacientes geriátricos, por falta de lugares más específicos y confortables para ellos en otras unidades del hospital. En este sentido, y a estas alturas, ya deberíamos ser conscientes de que el servicio de urgencias no es la sala de espera de las unidades de geriatría de agudos, de las unidades de subagudos, ni de las camas de hospitalización cuando estas faltan.
    Quizás es hora de plantearse ya una reorganización de los servicios de urgencias teniendo en cuenta que el paciente geriátrico no es uno más a segregar en ellos, sino el paciente más frecuente en ellos. Valorar las necesidades y medios a incorporar, y reorganizar el puzzle de medios de los que ya disponemos disponiéndolo con un encaje de piezas más efectivo.

    ResponderEliminar
  6. Manténgase conectado de forma no parada gracia nuestros paquetes ofrecen créditos entre
    individuos disponible día y noche tiene una tasa de interés del 2%
    A partir de 191 euros de correo electrónico solo. contacto: duroumarcel@gmail.com

    ResponderEliminar
  7. Las necesidades y circunstancias de las personas mayores pueden variar mucho. Y un especialista de urgencias geriátricas tiene en cuenta todas estas circunstancias para hacer mejor la atención médica. Además, este tipo de unidades viene muy bien para las residencias de ancianos porque pueden contar con mayor seguridad en la atención de sus residentes

    ResponderEliminar